A casi una semana de distancia, lo acontecido en Haití continúa golpeando al mundo entero. El propio secretario general de la ONU, Ban Ki-Moon, la ha definido "la más grave crisis humanitaria en las últimas décadas". Los programas de intervención internacional ya están activados y las ayudas, aunque con algunas dificultades, se están distribuyendo a la población. Junto a las obras salesianas, se han creado centros de agregación y asistencia, y los salesianos e Hijas de María Auxiliadora están acogiendo a muchas personas.
Las operaciones de recuperación de los cuerpos de los alumnos y docentes continúan velozmente. De acuerdo a las últimas informaciones se ha comprobado que en el derrumbe de la escuela salesiana han muerto 250 alumnos y algunos docentes. De éstos hasta ahora sólo han sido extraídos sesenta cadáveres. Muchísimos otros alumnos salesianos han muerto con el derrumbe de sus casas.
Por los salesianos que están en la zona, sabemos acerca del estado de desorientación e impotencia de la gente que ahora vive en las calles, en las plazas y los parques publicos.
La mayor parte de los alumnos y los enseñantes todavía están bajo los escombros. A las 16.53, hora local, cuando la tierra empezó a temblar, los alumnos de la escuela primaria se encontraban en el primer piso de una estructura de tres plantas, ahora convertidos en un cumulo de ruinas. Desgraciadamente también aquí, como en otros lugares de la ciudad, ya han aparecido episodios de saqueo, de donde se llevaron lo poco que quedaba: muebles, sillas y ordenadores que servían para las actividades didácticas.
También las otras obras salesianas de Puerto Príncipe se encuentran en las mismas condiciones. La urgencia ahora es garantizar a los salesianos de Haití un mínimo de infraestructura necesarias para acoger y asistir a las personas.
Las operaciones de recuperación de los cuerpos de los alumnos y docentes continúan velozmente. De acuerdo a las últimas informaciones se ha comprobado que en el derrumbe de la escuela salesiana han muerto 250 alumnos y algunos docentes. De éstos hasta ahora sólo han sido extraídos sesenta cadáveres. Muchísimos otros alumnos salesianos han muerto con el derrumbe de sus casas.
Por los salesianos que están en la zona, sabemos acerca del estado de desorientación e impotencia de la gente que ahora vive en las calles, en las plazas y los parques publicos.
La mayor parte de los alumnos y los enseñantes todavía están bajo los escombros. A las 16.53, hora local, cuando la tierra empezó a temblar, los alumnos de la escuela primaria se encontraban en el primer piso de una estructura de tres plantas, ahora convertidos en un cumulo de ruinas. Desgraciadamente también aquí, como en otros lugares de la ciudad, ya han aparecido episodios de saqueo, de donde se llevaron lo poco que quedaba: muebles, sillas y ordenadores que servían para las actividades didácticas.
También las otras obras salesianas de Puerto Príncipe se encuentran en las mismas condiciones. La urgencia ahora es garantizar a los salesianos de Haití un mínimo de infraestructura necesarias para acoger y asistir a las personas.
Las primeras cosas necesarias son: agua potable, alimentos en conserva y alimentos para niños, porque los viveres en la ciudad escasean y lo que se encuentra está en mal estado. Se necesitan también medicinas y tiendas de campaña.
La inspectoría salesiana María Auxiliadora de Sevila ha abierto una cuenta corriente en La Caixa: 2100 2542 65 0210099517.
La inspectoría salesiana María Auxiliadora de Sevila ha abierto una cuenta corriente en La Caixa: 2100 2542 65 0210099517.
