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Cabildo General Extraordinario

El pasado día 22 de septiembre, se celebró Cabildo General Extraordinario, en nuestra casa hermandad, con la asistencia de numerosos hermanos. Tras la invocación al Espíritu Santo el Hermano Mayor, tomó la palabra y explicó el porqué de este cabildo y la defensa de la Vida. Reproducimos el texto:
Queremos que de este Cabildo salga una encendida defensa del derecho de todo ser humano a desarrollarse desde el momento de su concepción hasta el de su muerte natural, que de testimonio publico de nuestra fe de cristianos, en resumen, que sea un canto a la vida. La junta de gobierno quiere pedir permiso al máximo órgano de la Hermandad para dejar constancia fehaciente, en nuestras Sagradas Reglas, para que las futuras generaciones de hermanos tengan conocimiento de nuestro pensamiento. Y de esta forma daremos testimonio firme ante la sociedad al realizar nuestra protestación de fe anual, en la que revalidaremos el compromiso de la Hermandad y el nuestro propio con vocación de permanencia sin quedarnos en un gesto puntual. Las Reglas que nos hemos dado son un modelo de aceptación de los Dogmas y Normas de nuestra religión, que nos vienen dados por las directrices que emanan de la jerarquía Eclesiástica. Esto en otras circunstancias hubiera sido suficiente, pero en los tiempo que corren pensamos que es necesario expresar nuestro compromiso con la vida de una forma más clara y patente, que no admita interpretaciones, si no que tenga una lectura categórica y concisa.
Es también nuestra forma de decir que no estamos de acuerdo en que un pequeño de nuestra especie, vivo y humano, sea condenado a muerte por ley.
Está demostrado genéticamente que la fecundación es el momento en que se constituye la identidad genética singular, y aquí empieza la vida.
Por lo tanto el aborto no es solo la “interrupción voluntaria del embarazo, sino un acto cruel de “interrupción voluntaria de la vida humana”
Resumiendo el aborto es un homicidio despenalizado.
NOSOTROS APOSTAMOS POR LA VIDA
Termino con las palabras de nuestro inolvidable Papa Juan Pablo II: “NO TENGÁIS MIEDO” y sigo: demos la cara, no seamos políticamente correctos y defendamos con valentía nuestras convicciones.
Por lo tanto pedimos vuestra aprobación para incluir en el texto de la protestación de fe el párrafo que aparece en el orden del día de esta Cabildo y que tenéis todos vosotros.
De forma que la misma quedaría de la siguiente forma:
 
“Nosotros la Hermandad y Cofradía de Nazarenos del Santísimo Cristo de las Almas, Maria Santísima de Gracia y Amparo, María Inmaculada y San Francisco Javier, erigida en la Real Iglesia Parroquial de Omnium Sanctorum de esta ciudad de Sevilla; consustancial a la Congregación de Maria Inmaculada y San Francisco Javier, agregada a la Congregación Prima Primaria de Roma, decimos y confesamos:
Que creemos firmemente todos los Dogmas y misterios de nuestra sacrosanta Religión Católica, Apostólica, Romana, única y verdadera; profesamos espacialísima devoción a los soberanos misterios de la Sagrada Eucaristía, de la Concepción Inmaculada de la Santísima Virgen y de su
Asunción Gloriosa en cuerpo y Alma a los Cielos.
Siguiendo las enseñanzas de estos Dogmas, afirmamos y defendemos que la vida de todo ser humano es inviolable en cada fase de su desarrollo, desde el momento de su concepción hasta el de su muerte natural, sea cual sea su condición.
También decimos que hacemos solemne voto y juramento de creer, confesar y defender la universal Mediación de Nuestra Señora, Madre Santísima y reina de todo el universo, en la dispensación de las gracias que vienen hasta nosotros por sus manos benditas, estando dispuestos a derramar nuestra sangre en defensa de esta verdad.
Dignaos, Señor, aceptar esta Protestación de Fe, juntamente con este voto y juramento publico y solemne, y, santificadas nuestras almas, con la mediación asidua de las virtudes de Cristo, Nuestro Señor, como de su Santísima Madre, que practicaran en su preciosa vida, logremos al final de esta vida, para nuestras almas, la gracia de gozar de la bienaventuranza."
Seguidamente se pasó a votar el texto que, aparece en negrita, se aprobó por unanimidad.
Finalizó este Cabildo con el rezo de un Padrenuestro por los hermanos difuntos.